lunes, 5 de septiembre de 2011

X.

Me desperté sorpresivamente y agitada, era domingo, de madrugada. Tenia una sensación fea, incómoda en el estómago.

Fui a la cocina a tomar agua, volví a la cama y ya mas tranquila intenté recordar qué estaba soñando.

Y así apareció la imágen de un cuarto todo pintado y decorado de blanco, con estantes blancos y mi amiga X. sacándoles el polvillo con un pequeño plumero.

En una siguiente escena X. acomoda en uno de esos estantes un gran jarrón de aspecto oriental, con fondo blanco y firuletes en azul, imagino que podria tratarse de los que he escuchado denominar "Mink?".

Se la ve recibiendo paz, una suerte de estado consolador, como si una ficha del rompecabezas se hubiera acomodado.

Y en una última escena, porque luego me desperté, el cuarto blanco se inunda de espesa maleza y se observa a X. como si estuviera muy enojada intentando desmalezar, con movimientos bruscos, vigorosos, como si quisiera transmitirle a esa maleza muda, que no iba a imponerse en ese cuarto.

X. observa una vez mas el jarrón y mueve la cabeza asintiendo, ese jarrón ahora estará bien allí, ahora es tiempo de desmalezar para la primavera, se dice a sí misma.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante tu sueño, a veces hay que desmalezar a fondo para encontrar paz en el interior.

Anónimo dijo...

Muy interesante tu sueño, a veces hay que desmalezar a fondo para encontrar paz en el interior. Saludos! Martin Siracusa